Si vais con la idea de repetir la experiencia (espero muy buena) que tuvisteis al ver la primera parte de Knives Out, debo avisar que hay que tener cuidado con las expectativas. La película de 2019 protagonizada por Ana de Armas las superó todas, buenas y malas.
Rian Johnson fue capaz de recuperar elementos clásicos del género y hacer un mix exquisito entre el drama, la comedia, el misterio y un comentario social, moderno y universal, que convirtió a Knives Out en una de las películas más originales de los últimos años. Con lo cual, esas expectativas con respecto a su segunda parte tiraban muy por lo alto.
Y nosotros, que, gracias a Netflix, ya hemos podido disfrutarla (esto se puede considerar spoiler) podemos confirmar que las expectativas han merecido mucho la pena. Glass Onion: un misterio de Knives Out es un magistral cluedo de tramas y personajes, con aun más comedia, más giros, más juegos y más escenas que obligan a estar pegados a la pantalla y no perder ni un segundo.
Knives Out 2 es más de todo
En un par de días, la película llega a cines con un estreno limitado antes de saltar directamente a Netflix el 23 de diciembre. Si tenéis la ocasión de verla en pantalla grande, gran decisión. Todos esos pluses que ya tiene de por sí Knives Out 2 aumentan si encima se pueden disfrutar en sala.
La película empieza como bien lo sugiere su título; con un misterio inmediato que sirve de pincelada para abrir a una gran historia donde nada es lo que parece, ni lo que se dice, ni lo que se ve. El guion de Rian Johnson vuelve a jugar con estos factores, y lo hace con gran maestría.
Entre toda la información que parece contener la película, todos esos detalles encuentran su lugar para contar muy bien una historia que nunca se queda corta. Es fascinante como en esas más de dos horas de duración, no hay ningún momento que se nos pase por la cabeza un pensamiento del estilo “a ver cuándo acaba esto ya”. Es todo lo contrario.
El misterio, sumado a un buen entramado de personajes, y una comedia que no deja nada que desear, permite que Glass Onion encuentre un balance sublime entre todos esos elementos que podrían echarse a perder en el caso de estar mal presentados. Si bien es cierto que todos ellos también formaron parte de la película de 2019, Glass Onion sabe aprovecharlos mejor y explotarlos con más inteligencia para que el espectador nunca se sienta engañado ni perdido.
Mejores personajes, otro gran elenco
Hay algo que destaca por todo lo alto de esta segunda parte de Knives Out. En este caso, no hablo del elenco. Sería injusto poner a uno por encima del otro cuando ambos brillan sin precedentes en su correspondiente película. Sin embargo, en cuanto a los personajes, Glass Onion da enfoque a un conjunto de protagonistas, en lugar de a uno solo como hizo con Ana de Armas en la original.
¿Quiénes son los protagonistas de Glass Onion? Podría tirar a poner la lista de nombres; Edward Norton, Janelle Monáe, Kathryn Hahn, Jessica Henwick, Madelyn Cline, Kate Hudson y Dave Bautista. Pero la verdad es que no sabemos quién es el verdadero protagonista hasta casi la mitad (más no voy a decir, eso ya lo descubrís cuándo veáis la película), y es algo que solo hace ganar aún más a Knives Out 2.
Si bien es cierto que ese riesgo de darle más presencia a casi todos los personajes en esta secuela marca ese punto de diferencia con respecto a la original, hay algunos que se quedan sin ese desarrollo completo que otros sí parecen tener. De primera mano, todos tienen algo que quieren, todos se encuentran con ese conflicto y se hacen unas presentaciones geniales para cada personaje. Es al llegar al final, cuando ciertos personajes que prometían mucho se quedan planos en ese arco.
Glass Onion: un misterio de Knives Out ya puede verse en algunos cines por tiempo limitado. Llega a Netflix el 23 de diciembre. Podéis esperar otra gran experiencia de la nueva película de Rian Johnson. No vas a tener ni tiempo para pensar en sí os está gustando o no, porque solo tendréis cabeza para lo que esté pasando en pantalla. Y aseguro, que va a encantar.
– Anabel Estrella