En esta miniserie de 4 capítulos, la oscarizada Helen Mirren da vida a la impactante emperatriz que ascendió al trono el 9 de julio de 1762 al trono de Rusia. Después de derrocar a su marido el temeroso Pedro III organizando su asesinato, Catalina la Grande, que provenía de Prusia (Polonia), uno de los reinos más influyentes de Alemania, ensalzó al Imperio Ruso, convirtiéndola en una de las potencias más importantes del mundo durante su reino que duró 34 años, siempre teniendo en la sombra de su reinado conspiraciones políticas, poder y lujuria.
¿Qué podemos encontrar en la serie?
Toda la trama desde que la emperatriz sube al trono. Helen interpreta a una mujer sedienta de poder, de fuertes convicciones, temperamento y ambición que acaba de proclamarse emperatriz de Rusia, país con el que está decidida a mantener como una de las grandes potencias del s. XVIII. Catalogada como “la Usurpadora” por su procedencia, Catalina intentará por todos los medios conservar el trono hasta el final y lidiar con todas las conspiraciones, dudas, alertas con las que se rodea y convive y que hace de esta serie lo más atractivo y atrayente.
El trono de Catalina siempre estuvo rodeada tanto de rumores como de amantes, los cuales les convertía en hombres de poder. Destaca su apasionada aventura con Grigory Potemkin interpretado por Jason Clarke. Esta relación será clave en la serie, ya que la pasión con la que desarrollan la relación, se puede comparar con la pasión con la que Catalina La Grande gobierna Rusia.
La emperatriz lidiará con su hijo, Pablo I, joven de 18 años influenciable y lleno de dudas, ya que fue arrancado de los brazos de su madre y educado por su abuela, la emperatriz Isabel I como futuro zar, pero Catalina no ve aún viable que sea digno del trono.
¿Qué destacamos de la serie?
Prácticamente todo. Los puntos fuertes de la serie que podemos destacar son su premisa en primer lugar, ya que está llena de acción, intrigas y dosis románticas llenas de pasión y de misterio que hacen que estés pendiente sin levantar la vista a todo lo que ocurra en las tramas que se plantean, con un vestuario y unos escenarios que te trasladan al s. XVIII sumergiéndote y envolviendote. Sin duda transmite todo lo que sabemos o hemos leído de esta mujer tan impactante para le época que marcó un antes y un después en un país tan grande e indomable como Rusia. Su otro punto fuerte e indispensable es su protagonista, Helen Mirren, que ya triunfó anteriormente con su caracterización de Isabel I de Inglaterra en la miniserie ‘Elizabeth I’. Se hizo con el Emmy, el Globo de Oro y el Premio del Sindicato de Actores, por lo que esta miniserie le viene como anillo al dedo y la interpreta de una manera meticulosa, elegante y toques oscuros.
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