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[Reseña] "Infierno bajo el agua"

“Chaaa-naan. Dos notas, y ya tienes al malo”.

Como bien decía Jack Black en “The Holiday”, con dos simples notas ya descubres lo que está por venir. Al igual que en “Tiburón” o en “Infierno Azul”, “Infierno bajo el agua” es una de esas películas en las que el miedo a las profundidades se acentúa sin quererlo.

Alexandre Aja (Horns, Mirrors) nos sumerge en este thriller de terror gobernado por caimanes en mitad de un huracán. Cuando un huracán de grado 5 golpea Florida, Haley (Kaya Scodelario, El Corredor de Laberinto) va en busca de su padre desaparecido (Barry Pepper, Salvar al soldado Ryan). Cuando lo encuentra gravemente herido en el sótano de su vieja casa, ambos se ven atrapados por la inundación, aunque ese no será el mayor de sus problemas para intentar lograr sobrevivir.

Hay que decir que la película no es innovadora. El guion se escribe “solo” y todos podemos intuir cómo va la historia desde el principio. No obstante, este hecho no resulta inconveniente para los amantes de este tipo de thrillers. Se disfruta, y mucho (y en tensión también).

Por supuesto, no es casualidad que la prota se desenvuelva perfectamente en el agua. Esto resulta casi un cliché, un estereotipo de esta clase de películas en las que es fundamental otorgarle una cierta ventaja al personaje principal para que no muera a la primera de cambio devorado por los lagartos gigantes que, casualmente, se han escapado del zoo de al lado. Vaya infortunio. Sin embargo, más que la integridad de la prota, nos acaba preocupando la seguridad de su mascota. -Por favor, que no se muera el perro- durante la hora y media de película.

Uno de los aspectos más positivos a destacar es la relación padre-hija, un poco destruida (por supuesto) en principio, pero que gracias a esta desgraciada situación, se ve reforzada y les hace crecer en confianza. Y es que la supervivencia saca lo más fuerte de ti, sobre todo si la vida de alguien a quien quieres está en juego. Me parece destacable el hecho de crear tensión y realizar una película exclusivamente con dos personajes (ya que el resto ocupan, aproximadamente, un 15% del resto de la película), así como las interpretaciones de ambos. La elección de actores me resulta acertada. La película no pide más.

Asimismo, la música y los juegos de cámara hacen muy bien su papel, creando esa sensación desagradable de angustia que a los talasofóbicos no nos hace ninguna gracia, pero que están extremadamente a favor de los encuadres y el ritmo frenético a contrarreloj del film, a lo que se añade algún ligero toque de humor escondido, para aliviar tensiones.

Negativamente, solo destacaría la inverosimilitud de algunas escenas respecto a las acciones de los personajes, si bien es que el guion de por sí resulta bastante inverosímil y es algo que resulta incuestionable en películas de esta índole.

Una película para disfrutar solo, o mejor bien acompañado, para los saltos en conjunto.

Infierno bajo el agua se estrena el 23 de agosto.

[Recomiendo el NO VISIONADO del tráiler para disfrutar de la película como realmente merece].

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