Sam Levinson nos muestra lo peor como sociedad y los peligros de la red.
Nación Salvaje es de esas películas que llegan sin hacer ruido, pero que sorprenden y deleitan, a todo un público como el del Sitges Film Festival 2018
Sam Levinson nos muestra a esa sociedad rancia y machista, que aún habita entre nosotros, reivindicando a la mujer y su papel en la sociedad. Y lo hace todo de una manera muy inteligente y sin sutilezas, con las redes sociales por bandera, con todo lo bueno y lo malo, que es mucho. Los vulnerables que somos como sociedad frente a las redes, ya que todos nuestros datos (vida),están el ciberespacio, al alcance de cualquiera con un simple click.
Esa línea roja que hay entre la privacidad y cómo te puede arruinar tu vida, una mentira filtrada en internet por un hacker.
El director combina la crítica a la sociedad americana actual, su clima político, con discursos que van desde la homofobia, la transfobia, el machismo o la misoginia. En definitiva, Nación Salvaje, nos mete de lleno el dedo en el ojo, para hacernos sentir incómodos, y a la vez, desprotegidos como sociedad.