No podía faltar en un ránking de nuestra web un especial ‘7 películas que nos han gustado este 2020‘. A continuación, os dejamos las películas que más nos han impactado o nos han hecho reír.
CORPUS CHRISTI (Carlitos)
Tuvo duros contrincantes en su carrera hacia el Oscar a mejor película extranjera, pero que no obtuviese la estatuilla no hace de menos a esta genial película polaca. Dirigida por un inspiradísimo Jan Komasa, ‘Corpus Christi‘ nos presenta la historia de Daniel (Bartosz Bielenia), un joven internado en un centro de detención juvenil, que obtiene una revelación sobre su futuro de mano de la religión. Al acabar su condena, se hace pasar por sacerdote en un pequeño pueblo.
El cine polaco está dándose a conocer con buenas películas, muchas de ellas con temas polémicos, más todavía en una sociedad tan religiosa. ‘Corpus Christi‘ es un buen ejemplo de ello y por eso no puede faltar en ‘7 películas que nos han gustado este 2020’.
ORíGENES SECRETOS (Gazapo)
Sin ninguna duda este ha sido el éxito nacional del año. Gracias a Netflix se ha podido publicar la película de David Galán Galindo. Está basada en el libro del mismo nombre, que escribió el propio David. A pesar de tener partes de humor, la intención es de ser una película de suspense centrada en resolver unos asesinatos en serie. Todo rodeado de mucho amor por el mundo del cómic.
La historia es entretenida, tiene un gran reparto y en general está muy bien adaptada, pero sin ninguna duda lo que destaca son los tebeos. El director es un gran fan de los cómics, como dejó claro en la entrevista que le hicimos, y lo transmite a la perfección.
RELIC (Miriam Asensio)
Dirigida por Natalie Erika James, ‘Relic‘ se estrenó en el Festival Internacional de Cine Fantástico de Sitges 2020. Con una duración de 90 minutos, en España la podremos disfrutar en nuestros cines gracias a Selecta Visión este próximo año. Nos cuenta la historia de Edna, que cuando desaparece, su hija Kay y su nieta Sam viajan al hogar familiar para encontrarla… Tras la reaparición, su comportamiento resulta cada vez más extraño y comienzan a sentir como si hubiera una presencia…
La destacamos sobre todo por su increíble muestra del terror emocional….no es la típica película sobre casas encantadas. Y, como se tenía que haber estrenado este año pero a causa del covid se ha retrasado, no podemos evitar desear que la apuntéis a vuestra lista de pendientes. Os dejamos por aquí la reseña que hicimos en la web.
¿Dónde está mi cuerpo? (Nitnaga)
‘¿Dónde está mi cuerpo?’ (J’ai perdu mon corps) es el primer largometraje de Jérémy Clapin (1974, cineasta y animador francés), basada en la novela de Guillaume Laurant (Amèlie) con título ‘Happy hand‘, el cual también trabaja como guionista. La historia narra el cautiverio que pasa una mano separada de su cuerpo y quiere volver a juntarse con éste.
La película provoca una sensación agridulce. La dura infancia de Naoufel, cómo ve su vida truncada por un accidente y cómo vuelve a encontrar una ilusión y un motivo para levantarse cada día a pesar de la adversidad vivida y todos los recuerdos y sensaciones positivas de la mano en su camino.
La cinta genera y transmite la sensación y la realidad de que la vida que vivimos es un conjunto de lo que sentimos y apreciamos con los sentidos, que esas sensaciones permanecen en nosotros para siempre, que debemos adaptarnos ante la adversidad con la energía que podamos y que debemos encontrar nuevas metas a pesar de situaciones negativas que vivamos.
No pasó desapercibido ninguna de las sensaciones que produjo, por ello debe estar en ‘7 películas que nos han gustado este 2020’. La reseña completa, aquí.
Wonder Woman 84 (Albert Perni)
Wonder Woman siempre ha sido un icono representativo de mujer fuerte, libre y altruista. ¿Qué, que rompe la cuarta pared dando un discurso sobre lo materialista que somos? ¿Y? Diana siempre ha estado un paso más allá, a niveles de altruismo queno podemos si quiera plantearnos. Vivía en un lugar utópico llamado Isla Paraíso por lo que su discurso y mensaje está más que justificado.
Aún no sé muy bien que el lo que esperaba ver la gente con ‘Wonder Woman 84‘, pero lo que sí sé es que, ni es aburrida ni le falta ritmo. Lo que yo he visto es a WONDER WOMAN. Por fin, tras una primera entrega, más oscura y sombría, porque la historia así lo requería, su secuela tenía que ser más lucida, vistosa y colorida. Son los 80 , esto hay que entenderlo bien, porque fue una década muy llamativa en diversos aspectos, le pese a quien le pese cuando dicen que es una historia simplista, llena de colorines y humor infantil. Parece que no entendemos que no todo tiene por qué ser sombrío y oscuro para enaltecer al personaje ni a la historia y no todas las historias -y aún menos las de superheroes- tienen que ser profundas y dramáticas para ser disfrutables.
Tenet (The Serial Master)
Cuando los cines parecían abocados al fracaso con todos los estrenos aplazados al siguiente año, sería Christopher Nolan quien volviera a intentar reavivar la taquilla cinéfila en un año tan difícil. Bien es cierto que ya se había estrenado alguna película en formato online o en salas más pequeñas, pero el primer gran estreno fue ‘Tenet‘.
Una película tan ambiciosa que tenía unas expectativas muy altas para la escasa afluencia de público en el cine. John David Washington y Robert Pattinson protagonizan en dos papeles enormes esta nueva cinta del aclamado director con una trama que mezcla thriller y espionaje con tintes de ciencia ficción. Si ya con ‘Origen‘ o con ‘Interestelar‘ nos ofreció una buena dosis de acertijos, en esta película no se queda atrás, ya que además aporta una técnica que aún no se había explorado en el cine y parte de una premisa muy interesante que hace que los espectadores se queden asombrados hasta el final. Una película que da gusto volverla a ver las veces que haga falta.
Mank (Ignacio Garrido)
En un año plagado, nunca mejor dicho, por las fake news, el uso propagandista de los medios de comunicación, la manipulación de las redes sociales y demás armas de distorsión masiva, ‘Mank‘ es una película que funciona a la vez como tropo de todo lo anterior al tiempo que retrato de una época en el cine con halo mítico -pero de realidad mucho más retorcida y prosaica- y como carta de amor meta-mitológica de David Fincher a su fallecido padre. Un circo de tres pistas simultáneas ejecutado con la brillantez visual habitual del realizador, un ritmo cadencioso pero que atenaza y el mejor monólogo del año en forma de fábula metafórica: el mono del organillero.